Ahora lo fundamental es que Europa no confunda el euroescepticismo de raíces xenófobas y nacionalistas que han marcado el Brexit con la crítica necesaria que merece la Unión por su progresivo alejamiento de las ideas de justicia social, derechos humanos y controles democráticos que han marcado las últimas décadas, y que es el origen de un malestar y una indignación que necesitan respuestas urgentes.
Brexit: campo, ciudad y los perdedores de la globalización
Lo que parece cada vez más obvio es que durante demasiado tiempo las élites occidentales han dado la espalda a los efectos cada vez más traumáticos de la globalización, sin utilizar sus (enormes) beneficios para asegurar que nadie se quede atrás. Los populismos de estos últimos años, desde Trump a LePen, pasando por Farage, son el resultado de esta arrogancia.
EL PAÍS
Tocados, no hundidos
Por su parte, la Unión ha quedado laminada al perder uno de sus principales socios, la expectativa de crecimiento ilimitado y el prestigio de haber resuelto —mejor o peor— otros grandes desafíos.
EL VIEJO TOPO
TOPO EXPRESS
La amenaza del crecimiento de la extrema derecha no es visible, al menos por ahora, en España. Tendrá influencia, sin embargo, en el proceso emprendido por el independentismo catalán. En efecto, uno de los argumentos más sólidos que han empleado los defensores de mantenerse dentro de España ha sido advertir que la independencia de Cataluña comportaría su salida inmediata de la UE, algo que parece aterrorizar a los partidos independentistas, que la han negado –hipócritamente
13 titulares obligatorios para entender qué ha pasado con el Brexit
La información es extensísima, hay múltiples interrogantes que quedan abiertos y cuyas respuestas no se conocerán hasta un plazo que no se puede determinar, pero que los expertos en derecho internacional apuntan que podría ser de dos años. Estos 13 titulares resumen el nuevo capítulo de la historia que se ha abierto este viernes 24 de junio.
El voto contra la UE también podría terminar convirtiéndose en un voto contra Reino Unido.
¿Por dónde empezar? Fue una votación que lo cambió todo. Las políticas económicas y de materia exterior elaboradas durante casi medio siglo quedaron anuladas en una sola noche. El "establishment" político destrozado por una insurgencia contra las élites. Las naciones de Reino Unido, divididas; e Inglaterra separada entre sus ciudades metropolitanas y las provincias postindustriales. Un voto contra la globalización. Una decisión que debilita a Europa y a Occidente. Hablar de terremoto político es quedarse corto.